sábado, 12 de abril de 2008

Salvador


¡Qué hartada de llorar! La historia es por todos conocida, pero la película te hace sentir como un hermano más del protagonista y te hace brotar todas las lágrimas que si aún no habías nacido nunca pudiste derramar por Salvador. Nunca un final triste, por muy esperado que fuera, me había impactado tanto. Podría decir mil cosas más que pasan por mi cabeza en estos momentos, pero me declaro del todo incapaz de transcribir en palabras el asco y la rabia que siento.

Jo no estimo la por, ni la vull per a demà,
no la vull per a avui, ni tampoc com a record;
que m'agrada els somrís
d'un infant vora el mar
i els seus ulls com un ram d'il·lusions esclatant.

I si canto trist
és perquè no puc
esborrar la por
dels meus pobres ulls.

Jo no estimo la mort
ni el seu pas tan glaçat,
no la vull per a avui, ni tampoc com a record;
que m'agrada el batec d'aquell cor que, lluitant,
dóna vida a la mort
a què l'han condemnat.

I si canto trist
és perquè no puc
oblidar la mort
d'ignorats companys.

Jo no estimo el meu cant,
perquè sé que han callat
tantes boques, tants clams, dient la veritat;
que jo m'estimo el cant de la gent del carrer
amb la força dels mots
arrelats en la raó.

I si canto trist
és per recordar
que no és així
des de fa tants anys.

Lluís Llach

5 comentarios:

Bielix dijo...

Yo no amo el miedo, ni lo quiero para el mañana,
no lo quiero para hoy, ni tampoco como recuerdo;
me gusta la sonrisa
de un niño junto al mar
i sus ojos como un ramo de ilusiones estallando.

Y si canto triste
es porque no puedo
borrar el miedo
de mis pobres ojos.

Yo no amo la muerte
ni su paso tan helado,
no la quiero para hoy, ni tampoco como recuerdo;
que me gusta el latir de ese corazón que, luchando,
da vida a la muerte a la que lo han condenado.

Y si canto triste
es porque no puedo
borrar el miedo
de mis pobres ojos.

Yo no amo mi canto, porque sé que han callado
tantas bocas, tantos clamores, diciendo la verdad;
que yo amo el canto de la gente de la calle
con la fuerza de las palabras
enraizadas en la razón.

Y si canto triste
es porque no puedo
borrar el miedo
de mis pobres ojos.

Anónimo dijo...

A mi me gustó, solo me falló el principio.

Elric dijo...

Claramente inspirada en estilo y filtros y uso de los colores en la maravillosa Munich de Spielberg, por cierto.

El opositor dijo...

Pues me la apunto.

Saludos,
Camacho (y ahí le hace falta de nuevoo!!)

Anónimo dijo...

Buen apunte Jesu.

Munich es la mejor película de Spielberg y una de las mejores de la década. Una película para reivindicar SIEMPRE.